sábado, 11 de abril de 2015

ADOLESCENCIA, UNA FASE DE PASO (III)...SEPARACION DE LA FAMILIA.

Buen día, estimado lector, seguimos adentrándonos con ilusión en el frondoso sendero de la adolescencia.

 

Llegamos a un primer destino después de estas tres etapas dedicadas a nuestros cachorros adolescentes y jóvenes con una entrada que aborda serenamente el largo proceso de "separación" o "distanciamiento" progresivo de los adolescentes y jóvenes de sus familias de origen.

 

La tarea es complicada en estos tiempos en los que muchas veces existe, y es lo normal, una separación emocional, moral y normativa de la familia,  que no se acompaña de una auténtica separación física (emancipación), que sólo puede venir dada a través de una independencia económica cada vez mas difícil y tardía para nuestros jóvenes.

 

Esta situación general, sin duda, causa ya conflictos familiares y lastra, con toda seguridad el presente y el futuro vital (personal y social) de muchísimos de nuestros jóvenes y por ende, de todos nosotros.

 

Y en verdad, es así. Uno de los momentos más importantes en la vida de un adolescente es la separación de sus padres. El primer paso en este sentido se hace en la edad escolar; el segundo durante la pubertad, entre los 13 y 18 años más o menos; el tercero al pasar de la juventud a la edad adulta.

 

Para que esto suceda es necesario que disminuya el prestigio de los padres. Los muchachos y muchachas comienzan a idealizar a otras personas adultas y a considerar siempre más importante la opinión de sus coetáneos e iguales.

 

Así, durante la adolescencia, nuestros hijos van descubriendo que hemos basado nuestra vida en unos valores, objetivos y estilos de vida "reducidos" respecto a los que ofrece nuestra "cultura" contemporánea llena de "modelos", existiendo por tanto, otros modos de plasmar su propia vida.

 

Lo normal, es que miren con distancia los comportamientos, las normas, las costumbres de la familia de infancia, sobre la base de las informaciones adquiridas fuera de ella. Contrastan y comienzan a realizar elecciones.

 

Es justo en esta situación evolutiva cuando nosostros, los padres, comenzamos a privar del soporte moral y afectivo tan copioso y abundante en los años de la infancia, pretendiendo  de ellos por una parte resultados excelentes en los estudios, en el trabajo, en casa...y la imputación de todas las responsabilidades propias de su crecimiento: este desajuste, digamos "natural", crea no pocos problemas a los muchachos.

 

Por otra parte, muchos padres, dan a entender que aceptan, solo en parte, decisiones eventuales de sus hijos y quieren continuar ejercitando sobre ellos, en muchas circunstancias, la autoridad de siempre.

 

Para los chicos y chicas, esta situación se revela compleja, por una parte, perciben mayor presión y una invitación a convertirse en adultos, pero, simultáneamente, una advertencia en contradicción con todo eso: "No eres lo bastante grande, por eso, hárás lo que yo te diga".

 

Hay muy pocos padres y madres dispuestos y en condiciones de renunciar a pretensiones tan contradictorias con respecto a sus hijos. Cuanto más estáticas sean estas pretensiones y cuanto más débil sea la fuerza interior del muchacho o muchacha tanto mayor será el riesgo de sentir fracaso.

 

Algunos chicos reaccionan a todo esto de forma apática, otros de forma agresiva, otros incluso se alejan de la familia...

 

Para los chicos y chicas, es importante entender también la difícil situación de los padres. Estos de hecho, se dan cuenta de que son tomados en menor consideración, de haber superado, a medida que los hijos se hacen grandes, el ápice del propio ciclo vital y en algunos casos comenzar un lento declive.

 

Contemporáneamente en muchos padres, en la mitad de su vida, se repiten algunos de los conflictos de la infancia. En esta situación "dificil", muchos padres tienen miedo, no dándose cuenta de la necesidad de tomar nuevas decisiones, de decir cómo continuar viviendo y a qué valores hacer referencia en esta segunda parte de la propia existencia. Además, ambivalentes ante la vitalidad y de las innumerables posibilidades de futuro de sus hijos pretenden repilotar el futuro de sus hijos, tendiendo a establecer relaciones conflictivas con sus hijos. Se entromenten en los asuntos de sus hijos cuando no deben, se convierten en padres aprensivos en exceso, o dejan de manifestar sus sentimientos, negando elogios o afectos tan necesarios para los muchachos.

 

Una familia (padres e hijos), capaces de entender en líneas generales, ambos procesos psicológicos, se sentira dificilmente culpable (por ambas partes) cuando poco a poco  el muchacho se aleje de la casa familiar, también sabrán afrontar de forma más responsable, las legítimas prestensiones que como padres les solicitamos y viceversa.

 

Para terminar,  y como durante estas últimas  tres entradas  "ADOLESCENCIA, UNA FASE DE PASO" de pulediamante.blogspot.com os presento un juego de interanción muy sencillo que os puede servir para clarificar vuestros valores, como personas, como pareja y como familia.

 
 

 

Para ello y con el listado de valores que adjunto más abajo, al que podeis añadir más valores, os propongo selecionéis 25 primeramente, de esos 25 seleccionados, reseleccionar 20, y así sucesivamente hasta quedaros con 8 valores, con los que más os identifiquéis, los que más os resuenen, como persona individual, como pareja y en familia

 

Además os propondré que en base a los valores elegidos analicéis vuestro propio presente, proyectéis vuestra vida en un medio plazo de (2 a 5 años) , analizando los medios y caminos de superación que os pueden llevar a alcanzar esos objetivos a medio plazo.

 

 Lo podeís hacer de forma visual dividiendo una cartulina en cuatro partes dibujando una cruz desde el centro. En el cuadrante superior izquierdo y con la ayuda de recortes de revista os describireis en vuestro momento Presente y en el inferior derecho ese Futuro deseable. En los cuadrantes restantes habría que descubrir y describir cuáles son los lastres (en el cuadrante inferior izquierda) y los caminos, medios y actos positivos hacia ese futuro deseable.

 

Podéis ayudaros de vuestra "selección de valores" para proyectaros en el futuro.

 

¿Que os parece la propuesta amigos?, os invito a coger papel y boli, una cartulina, revistas, tijeras y pegamento y...¡A jugar en familia!

 

Nos encontramos de nuevo, querido amigo  o  amiga,  aquí en pulediamante.blogspot.com.

 

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